Un primer paso es identificar oportunidades, generar ideas y propiciar un ámbito para que éstas evolucionen y logren posicionarse. ¿Cómo se logra básicamente esto? a través del intercambio, la conversación y la conexión entre las personas que trabajan en distintas disciplinas y rubros dentro de un mismo espacio. Conectarlas es la cuestión.

En éste sentido, el departamento de RRHH juega un papel central en crear comunidades y fomentar actividades en miras de establecer éstas conexiones, incluso con personas externas a la empresa para enriquecerse en materia de conocimientos y desarrollo.

Éstas actividades pueden ser internas, o ir más allá de los muros de la empresa, formales o informales, siempre con el objetivo de buscar inspiración para la generación de nuevas ideas.

Actividades internas e informales

Son actividades que se realizan dentro de la empresa, y no están coordinadas ni controladas por directivos. Los mismos pueden participar de ellas, siempre y cuando se comporten como un partícipe más, para generar confianza y distensión en el grupo.

Espacios de trabajo:

Físicos: son espacios colaborativos, con el fin de que se produzcan intercambios entre personas de disciplinas totalmente distintas, generando diálogos, acercamiento y traspaso de intereses, con todo lo fructífero que eso significa.

Virtuales: se trata de proporcionar plataformas online, como por ejemplo una red social dentro de la corporación.

Actividades externas e informales

Éstas actividades se dan en un ámbito externo a la empresa, sin su control y totalmente informales.

También es óptimo que desde la misma empresa se invite y garantice la participación de sus empleados en comunidades, eventos, actividades y foros externos que sean de interés, para ampliar perspectivas desde lo ameno e informal. Por ejemplo: una empresa dedicada al fitness podría invitar a sus empleados a participar de alguna maratón o actividad relacionada con el rubro. Una empresa dedicada al diseño gráfico podría garantizar que sus empleados participen de una muestra fotográfica, o de arte, para generar ese contacto y ampliar horizontes.

Estas actividades tienen un beneficio enorme, dado que propician la inspiración y fomentan la curiosidad, elementos sumamente importantes para la generación de ideas.

Actividades internas y formales

Son actividades que sí están guiadas por la empresa, y se incluyen objetivos y procesos formales y concretos. Suele ocurrir con ideas que surgen de las actividades externas e informales, y al resultar viables, se insertan en un proceso de evolución, desarrollo, y posterior implementación dentro de la empresa.

Pueden llevarse a cabo mediante reuniones semanales, presentaciones, talleres, charlas dictadas por expertos en materia de actualizar conceptos o informar sobre nuevas y actuales tendencias, por ejemplo.

Actividades externas y formales

Son actividades que se llevan a cabo fuera del espacio de la empresa, guiadas por la misma, y que involucra a profesionales o agentes externos que comparten conocimientos para luego trasladarlos a las actividades internas.

Estas actividades pueden ser por ejemplo anotar a sus empleados en algún curso de interés para el desarrollo dentro de la empresa, o enviarlos a participar de alguna conferencia, etc.

En conclusión, para llegar a la innovación es sumamente necesario la relación interpersonal de los empleados, entre ellos/as mismos/as y con personas externas a la empresa. El rol fundamental del RRHH es conectar a éstas personas y propiciar espacios para que se realicen las actividades antes mencionadas, las cuales proporcionan un terreno fértil y amable para el surgimiento de nuevas ideas, y la posterior innovación.

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